El lanzamiento del vehículo experimental intermedio IXV de la Agencia Espacial Europea (ESA) en el nuevo cohete europeo Vega se encuentra ya en una fase de planificación detallada, un paso importante hacia el vuelo de la nave en 2014.
Lanzado en una trayectoria suborbital desde el Puerto Espacial Europeo en la Guayana Francesa, IXV regresará a la Tierra como si fuera una misión de órbita baja, para probar y calificar las nuevas tecnologías críticas para vehículos de reentrada en el futuro.
Se alcanzará una altitud de alrededor de 450 kilómetros, lo que le permitirá alcanzar una velocidad de 7,5 kilómetros por segundo al entrar en la atmósfera. Se recogerá una gran cantidad de datos durante el vuelo hipersónico y supersónico, mientras es controlado por los propulsores y las aletas aerodinámicas.
IXV descenderá en paracaídas y aterrizará en el Océano Pacífico, a la espera de la recuperación y el análisis.
ESA y el fabricante del lanzador Arianespace firmaron el 14 de diciembre un contrato para estudiar el lanzamiento del vehículo a bordo del cohete Vega, como parte del programa VERTA (Vega Research and Technology Accompaniment).
El vuelo de calificación del cohete previsto para finales de enero abrirá el camino para cinco misiones VERTA que demostrarán la flexibilidad del sistema. A una tasa prevista de dos lanzamientos al año, el programa permitirá la introducción gradual de Vega en la fase de explotación comercial.
Tras el desarrollo de tecnologías críticas y la realización del diseño, fabricación, ensamblaje, integración y capacitación del vehículo se está trabajando en una ventana de vuelo entre enero y septiembre de 2014, informa la ESA.
La adquisición de la red de tierra ha comenzado, incluyendo el centro de control de la misión, kits de estación de telemetría en superficie, antenas transportables y una red de comunicación.
Vega es el nuevo pequeño lanzador europeo. Su rendimiento se complementa perfectamente con el del pesado Ariane 5 y los cohetes medianos Soyuz lanzados desde la Guayana Francesa.
Está diseñado para hacer frente a una amplia gama de misiones y configuraciones de carga útil con el fin de responder a las oportunidades de mercado con una gran flexibilidad. En particular, ofrece configuraciones capaces de manejar cargas útiles que van desde un solo satélite hasta un satélite principal y seis microsatélites.
Vega es compatible con masas de carga que van desde 300 a 2.500 kilos, dependiendo del tipo y la altitud de la órbita requerida por los clientes. El punto de referencia es de 1.500 kilos a un 700 kilometros de altitud de órbita polar.
FUENTE: ep
Comentarios
Publicar un comentario